domingo, 15 de noviembre de 2015

REFLEXIÓN

Nuestro profesor nos mando leer 3 artículos distintos, uno relacionado con las características de un buen estudiante, otro que hablaba sobre la motivación a la hora de aprender un segundo idioma y otro sobre el trabajo en equipo, aquí he hecho una reflexión de todos ellos:


Hoy en día los alumnos somos la parte central de la enseñanza-aprendizaje. Con el tiempo se ha ido reformando el sistema de educación con el objetivo de lograr mejores resultados en el rendimiento de los alumnos. Con el fin de que el estudiante realmente logre aprender y aplicar lo aprendido en su vida personal y laboral, no solo para aprobar un examen o pasar de curso, si no que vaya más allá, usando la reflexión, fomentando la autonomía, aprendiendo a ser crítico, investigando por sí mismo, indagando, reforzando los conocimientos adquiridos, desarrollando la autodisciplina, aprovechando el tiempo lo máximo posible, aprendiendo de sus errores, siendo constante…¨Estas serían las principales características de un buen estudiante.¨

Pero, ¿realmente ha cambiado la educación?  En muchos casos no, ya que el alumno sigue siendo pasivo y el docente es el que expone los temas y  entrega información, materiales, ejercicios y actividades al alumno. Lo que deberíamos hacer es investigar, para que seamos nosotros quienes presentemos los temas e intercambiemos información con nuestros compañeros enriqueciendo nuestros conocimientos, mientras que el profesor debería guiarnos para que adquiramos y desarrollemos las competencias necesarias para aplicarlas en nuestra vida como estudiantes y en nuestra vida cotidiana.

OTRO TEMA MUY IMPORTANTE ES LA MOTIVACIÓN

Para que un alumno adquiera motivación, necesita recibirla tanto de su interior como de su exterior para que encuentre el gusto por aprender cosas nuevas. El ser humano para realizar algo y conseguir un objetivo necesita dos tipos de motivación:

Motivación Extrínseca (ganar u obtener algo): Motivación externa, es aquella motivación que proviene de lo que sucede en el entorno, los sucesos que le proponen y las personas que involucra.

Motivación Intrínseca (interés, curiosidad): Motivación interna, es la motivación que surge del interior del ser humano, de las necesidades que se tengan como individuo, de los objetivos que se quieran alcanzar y de los gustos que se tengan.

Resumiendo, lo que involucra una motivación extrínseca sugiere que el profesor propicie una buena atmósfera para los alumnos, para que se sientan en confianza de poder preguntar y contestar de manera espontánea y segura, que no solo influya la recompensa por haber hecho cierta actividad. Con respecto a la motivación intrínseca debe atender las necesidades y gustos del alumno para que se sienta interesado en determinado tema, es decir hacer una actividad porque queremos, no porque haya un factor externo que nos obligue a hacerla. Todos los individuos somos diferentes, pensamos, actuamos, sentimos, nos comportamos y aprendemos de una manera específica. Por tal motivo cada persona tiene sus propias necesidades, las cuales tienen que ser cumplidas para que éste pueda tener una motivación y su aprendizaje sea más fácil.

 A la hora de aprender un segundo idioma, la motivación es algo necesario para los estudiantes,  les va a hacer ver el aprendizaje de una manera más positiva y darse cuenta de que mucha parte del éxito será el trabajo hecho por sí mismos. Lo primero es que el alumno tenga una buena motivación tanto intrínseca como extrínseca, de tal manera que la atmósfera en la que se encuentra le ayude a interesarse en aprender un nuevo idioma.
 Por otro lado el alumno se tiene que convertir en una persona autónoma al buscar por si solo los recursos que le puedan ayudar a seguir aprendiendo por su cuenta, para tener una autonomía que le ayude a reconocer sus necesidades y poder arreglárselas por sí solo ( A mayor motivación, sobre todo intrínseca, más alto es el rendimiento académico y mejores son los resultados obtenidos). Por lo tanto, el alumno también puede compartir lo sabe con sus compañeros y al mismo tiempo aprender de lo que ellos puedan compartir con él.  

De esta manera si el trabajo lo realizamos en equipo, cada uno aportaríamos lo mejor de nosotros mismos, teniendo en cuenta nuestros puntos fuertes y debilidades, aprenderíamos de nuestros errores y de los de los demás, ya que cada uno tenemos unas características y unos condicionantes distintos como las herramientas de un  taller y al juntar lo bueno de cada uno conseguiríamos ¨unos muebles de gran calidad.¨ (Con la unión de todos obtendríamos los mejores resultados.)



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